Se muestra «optimista» sobre la posible solución del caso
José Carlos Fernández, padre de Déborah Fernández-Cervera, se ha mostrado hoy «optimista» sobre la posible solución del caso de desaparición y muerte de su hija, hechos sucedidos en 2002 y cuyo enjuiciamiento se ha reabierto ahora. En este sentido, Fernández ha asegurado que existen indicios «importantes», si bien ha especificado que no son concluyentes.
Acompañado por su mujer, Rosa Neira, y su hija, Rosa, José Carlos ha realizado estas declaraciones a los medios de comunicación después de declarar en el Juzgado de Instrucción número 2 de Tui.
José Carlos Fernández ha invitado a observar «el rumbo que toman los acontecimientos», y ha planteado la posibilidad de que en los próximos días se llame a declarar a más personas, como su esposa o su sobrina Nuria, que estuvo con Déborah el día de su desaparición.
De este modo, Fernández ha insistido en la necesidad de mantener una actitud «optimista» durante el proceso judicial y a esperar a que todas las personas que deban declarar comparezcan en el juzgado «para saber los hilos de los que tirar».