Esta madrugada, a las 00:13 horas, un particular llamaba a la Policía Local de Vigo mostrando su preocupación a consecuencia del extraño sonido que salía del interior de un contenedor en la calle Rabadeira.
La patrulla desplazada al lugar procedió a la comprobación del interior del colector. Tras verificar que efectivamente del mismo salían sonidos extraños, observaron varias bolsas plásticas perfectamente cerradas, detectando movimiento en una de ellas.
Los agentes procedieron a abrirlas, comprobando que en el interior había dos cachorros de perro mestizo recién nacidos.
Al no contar con recursos, ni materiales para poder atender debidamente a los animales, los actuantes, al objeto de evitar que pudieran fallecer, decidieron trasladarlos al centro de urgencias veterinarias más próximo.
Una vez en el lugar, responsables del mismo los introdujeron en la incubadora, a la espera de que al inicio del turno de mañana fueran recogidos por agentes de la unidad Umir y trasladarlos a la protectora. En todo caso y al no tratarse de un servicio municipal, los agentes se hicieron cargo de la factura del citado veterinario.